Ha sido mucho trabajo pero creo que me he vuelto más paciente. Sufría de una clara incontinencia de impulsividad que me impedía analizar las situaciones antes de y me llevaba a tirarme de cabeza según me tincaban las cosas. Creo que he tenido suerte y nunca tuve una situación con graves consecuencias, sin embargo no es buen negocio dejar de lado las neuronas.
Me cuesta, es cierto, pues mi naturaleza me lleva a actuar impetuosamente y son muchos años siguiendo el mismo esquema, pero he aprendido a detenerme para pensar mejor las cosas, y decidí aguardar los momentos adecuados de habar o actuar frente a distintas situaciones. Ahora escucho más y opino menos, pues mastico un poco mejor la información que recibo. Además, me di cuenta que el mundo no se va a acabar mañana ni pasado, por tanto ¿qué importa esperar un día más si tengo probabilidades de un mejor resultado? Insisto, la impulsividad no siempre trae buenos dividendos (induce a cometer errores), por algo no aparece como virtud y la Paciencia sí.
Resumen: Sigo luchando contra mi ansiedad, pero ahora no sufro. Ha sido una buena terapia... Ya les contaré cuando obtenga mi doctorado en Asertividad con mención en Paciencia XD
1 opinólogos:
wen doctorado Vita!
un abrazo!
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