Enamorarse y des-ídem

Ay amor que despierta las piedras, ay de aquel que no te sienta alrededor,
Ay amor que nos abres las puertas, ay amor tan necesario como el sol.
Cuando llamas estoy, a la hora que tu digas voy.

Creo que hoy debo haber escuchado al menos 10 veces esta canción. Es añeja como ella sola, pero me gusta. Me hace pensar sobre el hecho de enamorarse... porque siempre los cantantes y poetas nos quieren hacer creer que el amor es eterno, pero no se dan cuenta que sería una condena insoportable vivir enamorado de alguien cuando no te corresponde.

Tantas veces nos quitas la pena, como tantas es amargo tu sabor.
Ay amor del jardín yerbabuena, como espina puede ser el desamor.

Siempre he sido de la idea de que a quien se enamora también se le concede la capacidad de desenamorarse. Porque no puedo creer que diosito sea TAN mala clase de permitir que uno se enamore para siempre de una sola persona en toda la vida, porque ¿qué sucede si esa persona se muere o no te corresponde? ¿Vas a tener que ser infeliz toda tu vida por el desamor de ese alguien? Nada que ver, sería demasiado triste! Y vean que hay gente a la que pareciera que le gusta sufrir! Porque siguen ahí: pegados, enamorados, negándose a olvidar... Me parece que el problema está en uno mismo, puesto que cuando uno se enamora empieza a cegarse y pierde mucho de objetividad. Todo nuestro mundo se ve teñido con los recuerdos y/o pensamientos sobre ESA PERSONA. Queremos tenerle cerca, verle, abrazarle y ojalá instalarle uno de esos artefactos como walkie-talkie que tienen para los bebés sólo para asegurarnos que se encuentra bien.

Ay amor que despierta las piedras! Ay amor que derriba fronteras!
Si fueras posible amarrar, tenerte siempre cerca, poderte controlar.
Saber cada paso que das, si sales o si entras, si vienes o si vas las narices enseñar,
ay amor como inmenso es el mar . . .

Y sí, creo que despierta piedras y derriba fronteras, porque uno se pone bien corajudo cuando se enamora, ¿se han dado cuenta? Y también se pone uno bien tozudo, y muchas veces piensa que por jugársela a concho las cosas DEBEN resultar, y nos cegamos y porfiamos contra el mundo para tratar de doblarle la mano al destino y que ella/él por fin nos de el ansiado "sí", y en esa lucha desesperada dejamos de ver las pistas que nos va dejando Diosito en el camino para que encontremos otros caminos, o mejor dicho, otras personas. Porque yo creo que él nos ayuda y nos va entregando herramientas para que nos desenamoremos, pero uno es quien no se da cuenta... Sin embargo, como reza el dicho "todo lo que sube tiene que caer" así mismo yo creo que tal como uno se enamora, tiene que poder desenamorarse... Quizá sólo es cosa de tiempo... y MUCHA voluntad.

Cuando llamas estoy, a la hora que tú digas voy...

PD: Ahora ya van más de 20 veces que la escucho... les dejo el link por si acaso...
Para escuchar la canción pinche aquí...