Hace 3 años que no me tomaba vacaciones debido principalmente a cambios de pega a fin de año y hoy vengo llegando de La Serena donde estuve más de una semana y lo pasé regio. Confieso que no soy muy amante de la playa y tampoco del sol, pero esta vez me bañé como nunca y hasta me siento una garota por lo bronceada que ando :D
Extrañaba el sonido del mar, el olor de la playa, el hecho de cerrar los ojos y dormir un rato sobre la arena. Despertar y ver el agua llena de pequeñas luces que se forman cuando rebota el sol sobre la superficie.... Aahhhh!!! Increíble!!
La Serena siempre me sabrá un poco de dulce y agraz, pero voy sintiendo que cada vez se vuelve más dulce gracias a las nuevas vivencias que voy echando a mi baúl. Además mi segunda familia es un 7... Agradezco a mis anfitriones por la paciencia y amor con que me recibieron en su casa todos estos días, y por acompañarme a todos lados donde se me ocurrió ir. Fue una semana espectacular... y este jueves se viene la segunda patita: Buenos Aires!
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