Mentiras verdaderas

domingo, 11 de noviembre de 2007
No hablaré de la película. De hecho es extraño hablar ahora de algo de lo que no puedo hablar.... Y es increíble a veces constatar la cruda realidad de quienes mienten por tratar de tener una vida más llevadera y se tragan sus lágrimas pensando que en el futuro eso les pueda hacer más feliz...

Estaba bien. Hasta ayer. Pero me estoy dando cuenta que me van quedando -me guste o no- muchas lágrimas por derramar y calles por transitar... Y acá sigo, simplemente luchando por estar bien, por sonreír aún cuando no tenga ganas y aguantándome las ganas de llorar.

Quizá sea el exceso de alcohol sumado a las muchas horas sin dormir, pero puede que justamente este exceso es lo que me hace sacarme esta pena que cuando las cosas van bien no puedo quitarme.

Y aunque probablemente no leas esto -quizá nunca- quiero que sepas Maka que nuestra conversación de hoy no fue una "volada de borrachos", y quizá simplemente ambas necesitábamos un hombro donde llorar... Y aunque mis dolores sean más pequeños comparados con los tuyos, dentro de MI mundo éstos pesan... y me gustaría por fin dejarlos de arrastrar.

Esta canción la quiero dedicar a todos aquellos que prefieran los finales inmediatos y misericordiosos antes que las amistades largas y... maltintencionadas

7 opinólogos:

Anónimo dijo...
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 kotto dijo...

pucha niña... un abrazo y ánimo...

markín dijo...

Cuando se dice de común: por qué a mí Dios? siempre pienso en esta estrofa

"Dios mío, si tú hubieras sido hombre,
hoy supieras ser Dios;
pero tú, que estuviste siempre bien,
no sientes nada de tu creación.
¡Y el hombre sí te sufre: el Dios es él!"

Y como somos imperfectos, nos queda lamentar de nuestras emociones. El, las sentirá con nosotros?... si alguna vez habría sufrido de este "amor", quizá no nos dejaría tan desamparados.

Chau.

Bruja_In_Love dijo...

mi abuelita decía... mejor una colorada que mil amarillas.

Unknown dijo...

pru

elalcaravan dijo...

ánimo, ojalá puedas estar mejor

Anónimo dijo...

Pucha, oh...¡vamos, a recuperar la sonrisa! Creo que debemos de enfrentarnos con nuestras tristezas a tramos cortos en el camino...qué tan cortos o qué tan largos, sólo la experiencia nos ayudará en ello.

Saludos cordiales.